Como anticipo a el comentario de la primera novela de Pedro Castelló, "Naufragos sin mar" , os dejo un relato que el autor presentó a un concurso de relato breve que convocaba el Heraldo de Aragón y que ha ganado el segundo premio, publicandose ayer en el citado periódico.
Creo conveniente decir que para los que no hayan leido la novela, este relato de Manolo que aqui os dejo, anticipa muchas de las claves y de el estilo tan personal que tiene este joven autor. Entusiasta y obserbador de la realidad con todos sus matices.
Espero que les guste.
Cierzo en los bolsillos
A veces hacíamos el amor durante noches inolvidables, pobladas de risas apresuradas, lanzándose al vacío de un tiempo detenido, palabras obscenas en un motel de carretera y alcohol inyectado de sus labios nostálgicos. Pero después me invadía una extraña sensación. Era como estar en un aeropuerto esperando una maleta que nunca salía, el temblor en los dedos al pisar un corazón de arena en la playa, o el vértigo en la mirada al ver un ramo de flores secas en un arcén. Marta era un tango furioso en un día de lluvia, un billete de vuelta al infierno de Dante, el verso más triste que pude escribir por aquel tiempo de vino y espinas frente a una hoja en blanco. Marta era la sirena de Bunbury varada en Lanaja, la última apuesta de Mauricio en un tren de madera abandonado en Canfranc, el sonido solitario de un tambor en Calanda una noche de agosto. Tu ciudad es triste y gris. Me escupía a veces tras varios días sin dirigirme la palabra, apurando la botella de Jack Daniel's y arrojándola con violencia al suelo manchado de olvido. Zaragoza es una nube hinchada con forma de león dormido, una niña sonriente violada por un viento despiadado, un río achocolatado, desangrándose a cada instante. Tu ciudad es una cárcel sin barrotes, una pecera de cristal gigante…. Y yo, yo solo soy el pez de Cortázar. Susurraba al final, enmudeciendo de nuevo durante horas, levantándose de la cama tan solo para mirar por la ventana con los ojos llenos de arena. Mientras, yo la miraba entre la boira que en ese momento se cernía sobre nosotros como un presagio, y escribía en mi mente aquel cuento de soledad compartida con el personaje más atormentado que había creado. Los días de cierzo, con los bolsillos repletos de arena y la maldita niebla en los ojos, todavía me acuerdo de ella.
SEGUNDO PREMIO. Concurso de relato breve Heraldo de Aragón para celebrar el día de San Jorge, patrón de Aragón.Manuel Ángel Castelló. Zaragozano. En 2008 publicó su primera novela, 'Náufragos sin mar'. El fallo reconoce su "poema-cuento sugerente y compacto".
Manuel ángel Castelló es miembro fundador de la Tertulia Literaria la Republicana, a la cual también yo pertenezco.
4 comments:
Enhorabuena a Manuel Castelló por su premio, no conozco su obra pero éste "trocito" pide el leerla completa.
S. Manrique.
Me sumo a la enhorabuena al autor, que se que escribe de puta madre.
y a ti, Luisico, decirte que no sé como lo haces, pero que te envidio terriblemente este blog que firmas¡Que nivel!...Y encima, pintas de maravilla, y por lo que parece cocinas de escandalo...¡Qué joyica!
Un reato apocalíptico y melancólico, como tiene que ser. Me gusta.
Un saludo
Es muy bueno el relato.
En Naufragos sin mar ya apuntaba maneras poéticas. Le Pregunté una vez si había escrito poesía, pues la carga poética de su novela era muy alta, pero él me dijo que no. Este relato tiene más poesía, ¿es posterior a la novela?
También dijo que estaba preparando otra novela, ay madre..., que tenemos escritor para rato. Estoy deseando leerla.
Enhorabuena, Luis por este blog tan conseguido, muchas veces me asomo por aquí, pero como no solemos coincidir en las lecturas no sé qué ponerte. Excuse-moi.
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